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Las sillas de ducha son cada vez más comunes en los hogares debido a una variedad de factores, que incluyen problemas de movilidad, problemas de salud y problemas de equilibrio, entre otros.
Las sillas de ducha son cada vez más comunes en los hogares debido a una serie de factores, que incluyen problemas de movilidad, condiciones de salud y problemas de equilibrio.
Además, los platos de ducha se han vuelto más populares en los baños durante los últimos diez años. Dejando a un lado las bañeras porque la practicidad gana puntos en nuestra ajetreada vida diaria. Ahora pueden acomodar cómodamente una silla de ducha en el interior porque ahora son lo suficientemente grandes.
Las sillas de ducha están hechas para personas con movilidad limitada o que requieren apoyos como un bastón o un andador. Esta reducción en la movilidad les dificulta realizar las tareas diarias.
Una de las principales ventajas que brindan es un menor riesgo de resbalones y caídas no intencionales para las personas mayores o discapacitadas en el baño.
Además, hacen que sea más sencillo y cómodo para los familiares y otros cuidadores de personas con este tipo de discapacidad ducharlos y asearlos.
